Se ha
cerrado una puerta,
se ha cerrado una casa,
se han
callado unas voces.
De
cinco niñas correteando por la casa
metidas
todas en el baño,
se
peinaban el moño con horquillas en cantidad,
se
pintaban la raya del ojo con humor.
Termino
la música de Enrique Guzmán,
terminaron
los guateques con sus discos.
Sé que
cerrar una casa,
dejar
todos los recuerdos dentro,
es muy
duro.
Cuando
en ella se amo tanto,
se
quiso tanto.
Ya no
quedan las personas que la dieron calor.
Con
ellas se fue mi juventud.
Verano del 2009