Amigas y amigos hay
pocos.
Suelen ser el reflejo de nosotros mismos,
poseen nuestras virtudes,
y pocos de nuestros defectos.
Cuando buscamos un amigo
deseamos que tenga las virtudes
que a nosotros nos faltan.
Exigimos poco y damos mucho.
¿Cómo es la amistad?
Es como un flechazo,
es como un enamoramiento.
Es como si cuando la conocemos,
nuestra amistad se completa.
Hay muchos conocidos y pocos amigos.
Pero cuando la amiga del alma existe,
todo nuestro ser vive.